YUNGUYO GLOBAL
Moisés Suxo Yapuchura
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- La Etnicidad en la Evolución Económica de los Aymaras de Lima.
- La Zona de Desarrollo Próximo en el Aprendizaje del Niño Aymara.
- Propuesta de Enseñanza y Aprendizaje de la Lengua Originaria en Áreas Urbanas
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Manuel Gallegos Casas
José Morales Serruto
Javier Cayo larico
Elisbán Dante Mamani Laurente
- Nuevo Código Procesal atenta contra principios constitucionales.
- Entrevista acerca de los principios de economía procesal ...
- La protesta tiene justificación ....
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Eligio Copari Jota
- Lucubración, Meditación, Reflexión ...
- Fisiología Humana
- Obesidad
- Prevención y Control de Enfermedades Renales
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YUNGUYO MÍO, ERES UNA PERLA…
Ubicada al sur de la región de Puno, en la misma línea de frontera con Bolivia, la ciudad de Yunguyo, es la capital de la provincia del mismo nombre, es uno de los lugares con mayor encanto paisajístico, esta ciudad que antaño crecía al compás que le marcaba el desarrollo galopante, hoy parece dormida, con una quietud que desespera. Al parecer resignada ya de estar lejos de las grandes aspiraciones. Será que los sueños ya no iluminan la belleza de este istmo de ensueño de riqueza incomparable. Así es, bien guardada por sus apus Juana y K`apia, Yunguyo duerme con su hermosísimo entorno natural, acariciada con amor por los lagos: Mayor o Chucuito y el cristalino Wiñaymarca.
Da pena decirlo, pero llevada por su capital la provincia entera duerme, esperando despertar cuando lleguen los buenos tiempos. De verdad conmueve como los distritos, los centros poblados, las comunidades, tratan de despertar y despertar a su amada capital, pero duermen y parece que el tiempo se hubiera detenido desde hace muchos años.
Así esta Yunguyo, uno de los lugares mas hermosos de la región puno, tiene dos corredores irónicamente llamados turísticos. De la ciudad de Yunguyo hasta el distrito de Tinicachi, pasando por los distritos de Ollaraya y Unicachi. Y de Yunguyo al Distrito de Copani. En estos corredores de un encanto paisajístico incomparable se ve la riqueza agrícola, pecuaria, piscícola, etc. sobre todo arqueológica. De Yunguyo al distrito de Cuturapi, con otras características se repiten los atractivos, todo es hermoso aquí y todo lugar guarda fragmentos de nuestra historia. El descuido y la incapacidad de las autoridades hacen que estos recursos no se muestren.
Lo que llama la atención, es la apariencia que se adopta, que por esconder el desconocimiento, se hable sin saber, de desarrollo, de cultura, con sentimientos intensos; ya se trate de nuestra historia, de nuestras costumbres o de nuestros valores, confunden la esperanza con el miedo de no tener iniciativa. Para muchos, cuando son autoridades, reconocer y merituar a nuestros valores en vida, es algo muy cercano o muy lejano, hasta que se van si hacer nada, con la desazón de la incompetencia.
En fin por ahora, olvidemos, tiene un sentido más profundo, rectificarse y asumir aquello que esta desligado de toda connotación política partidaria. Quizá así se entienda mejor que nos estamos olvidando de uno de los hombres mas insignes que junto con otros que en su momento resaltare, nos dan la alegría que nos caracteriza a los hombres de frontera. Don ANGEL CRUZ MEZA cuya grandeza de alma, de corazón sublime, le lleva a agradecer un galardón inanimado e indiferente. Solo él puede comprender que no es ese el reconocimiento que se merece. Pero así es el maestro ANGEL CRUZ, persona al cual los yunguyeños le debemos la más hermosa melodía y la sublime y dulzura de los versos de aquel himno que se entona en las ceremonias más solemnes y en ocasiones ponen fin a una noche de bohemia yunguyeña. No importa si estemos tristes o alegres pero siempre la entonamos con conmovedora emoción, hasta que las lágrimas surquen el rostro que se contrae con el recuerdo de la tierra añorada, cuando uno esta lejos. Ese pues es el legado de don Ángel, la mas grande composición que se haya escuchado.
Olvidemos por ahora nuestro descuido y renovemos nuestras esperanzas y promesas, recordando cantar a los mas de un millar de sicuris de Tata Pancho; elevemos hoy al cielo, la sublime y la dulzura de la canción hecho himno, que Don Angel nos regalo:
“Oh sabia naturaleza, has protegido mi tierra, con dos grandes fortalezas, Cerros Juana y el Kapia. / Yunguyo Mio eres una perla, en las orillas del Titicaca, Que brilla en la historia patria, desde tiempos pre incaicos”. Salud Yunguyo en tu XXIV aniversario, Salud don Ángel, su canción resonará en el mundo andino, por siempre.
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http://boliviateamo.blogspot.com/2008/11/evo-garantiza-eliminacin-del-latifundio.html
El artículo lo busqué en "Los Andes" sin resultados ...
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